Alcanzar la felicidad resulta más complicado si nuestra autoestima es baja y tendemos a compararnos con los demás. Valórate a ti mismo y recuerda que nadie es perfecto, pero tienes muchas virtudes
En ocasiones, es normal tener algún problema puntual con nuestra autoestima. Nadie es perfecto y, a veces, nos centramos demasiado en los aspectos negativos y pueden asaltarnos las dudas. Sin embargo, lo que no debería pasar es que esto cobre demasiada relevancia en nuestro día a día, ya que podría llegar a desencadenar graves problemas de salud mental. Así pues, todos deberíamos repetirnos el siguiente mantra a diario: ¡valórate a ti mismo!
Esta debería ser una de las principales órdenes que recibimos por parte de nuestro cerebro al levantarnos, como un mandamiento esencial para vivir. De todos modos, como es perfectamente normal que flaqueemos de vez en cuando, en este artículo te daremos algunos consejos que te pueden ayudar a cumplir con ello. Además, profundizaremos en lo que significa realmente tu nuevo mantra favorito y te lo repetiremos por si no te ha quedado claro: ¡valórate a ti mismo!
¿Qué significa valorarse a sí mismo?
Cuando hablamos de valorarte a ti mismo, nos referimos a tener en cuenta que tú eres quien más y mejor debe quererte. Seguramente tendrás algunos defectos, como todos, pero no cabe duda de que los compensas con miles de virtudes. Valorarte a ti mismo es una muestra de respeto hacia tu persona, algo imprescindible para alcanzar la felicidad.
Valórate a ti mismo: algunas frases que te ayudarán a hacerlo
Dentro de este proceso de sanación de la autoestima, existen algunas frases que podemos repetirnos a nosotros mismos para aprender a valorarnos. La mayoría de ellas parecen evidentes, pero a la hora de llevarlas a la práctica, no siempre nos resulta factible. Por eso nunca está de más recordar algunas:
- “Te has criticado a ti mismo durante años y no ha funcionado. Prueba a halagarte y observa qué ocurre.” (Louise L. Hay)
- “Hasta que no te valores a ti mismo, no valorarás tu tiempo. Y hasta que no valores tu tiempo, no harás nada con él.” (M. Scott Peck)
- “La opinión de otras personas sobre ti mismo no tiene por qué convertirse en tu realidad.” (Les Brown)
- “No dependas de otra persona para ser feliz y valorarte. Tú eres responsable de esto; si no puedes quererte y respetarte a ti mismo, nadie podrá hacer que esto ocurra.” (Stacey Charter)
Valórate a ti mismo con estos consejos para el día a día
Parece muy sencillo decirle a alguien “valórate a ti mismo”, cuando no estás viviendo sus circunstancias, pero lo cierto es que a veces no sirve de mucho esta frase. No obstante, cuando la escuches, ten en cuenta que la otra persona trata de empatizar contigo y ofrecerte un punto de vista externo, que en muchos casos puede ser más acertado que el tuyo propio.
No te compares constantemente con otras personas
La vida no es una competición, piensa que es totalmente posible que otros destaquen más que tú en determinados aspectos, pero esto le ocurre a todo el mundo. En realidad, no solemos ser justos cuando nos comparamos con otras personas y tendemos a cometer el error de poner el foco en sus virtudes y en nuestros defectos. ¿La solución? Las comparaciones son odiosas, así que procura dejarlas de lado.
Aprende a decir que no
¿Cuántas veces has hecho o dicho algo que no te apetecía? Actuar para complacer a los demás cuando no estamos de acuerdo supone un ataque directo hacia nosotros mismos. Saber decir que no te puede ahorrar muchos problemas de salud mental.
Ríe y sonríe cada vez que puedas
¿Has oído hablar de la risoterapia? Se trata de un tratamiento alternativo basado únicamente en la risa y está completamente demostrado que funciona. La explicación detrás de su éxito es que una simple risa es capaz de mejorar nuestro ánimo, incluso en los peores momentos.
Dedica tiempo a tu bienestar
Pon en práctica tus aficiones preferidas. Esto te servirá para desconectar y tomar perspectiva de quién eres realmente, cómo eres y qué puedes mejorar, pero también de aquellos aspectos en los que ya estás dando tu mejor versión.
Potencia tus virtudes y minimiza tus defectos
Como ya hemos comentado, tienes muchas virtudes y estas deben quedar siempre por encima de tus defectos. No hay que olvidar siempre las primeras y anunciar a bombo y platillo los segundos: esto no te beneficiará en absoluto.
Habla bien de ti
Si te comportas bien con las personas a las que quieres y sueles hablar bien de ellos, ¿por qué no hacerlo contigo mismo? No te preocupes, no nos referimos a la prepotencia, si es que has tenido esa sensación. Se trata simplemente de ser capaz de verbalizar tus virtudes.
Cuida tus pensamientos
Nuestros pensamientos no son más que una conversación con nosotros mismos y, como tal, nos afecta como cualquier otra conversación o incluso más, ya que nos podemos repetir las mismas cosas de manera constante, ser más duros que cualquier otra persona y, a nuestros ojos, mucho más fiables. Además, no tenemos escapatoria, así que debemos evitar a toda costa los pensamientos autodestructivos.
¡Valórate a ti mismo! Nadie lo hará mejor que tú
Seguro que has escuchado miles de veces aquella frase que afirma que “si no te quieres tú, ¿quién te va a querer?”. Incluso puede que la hayas oído en primera persona: “si no me quiero yo, ¿quién me va a querer?”. Pues bien, si eres de esos que suele verbalizarla con frecuencia, ¡enhorabuena! Lo estás haciendo genial. Si, por el contrario, no te lo crees, aplica todos nuestros consejos. Valórate a ti mismo, porque de ello dependen cuestiones tan esenciales como la salud mental, de la que ya hemos hablado, pero también tu rendimiento diario en aquello a lo que te dediques, tu actitud en la vida o la imagen que los que te rodean puedan tener de ti. No cabe la menor duda de que, cuando nuestra autoestima crece, las cosas comienzan a ir mejor, ¡así que empieza por aquí!